Plaza dura o tapa de aparcamiento (de los años 60), aunque bueno ésta, la de San Martín y su colindante, la plaza de las Descalzas Reales, se salvan no por su religiosidad sino porque han permitido algunos parterres de árboles y arbustos con cipreses que enmarcan las fotos al convento de las Descalzas Reales.
Hace unos años a alguien del ayuntamiento le pareció poca vegetación, llegaron estos megamaceteros de madera, que sombra poca da pero al menos su verde alegra.
Sobre esta plaza se asentaba el desaparecido monasterio de de San Martín, fundado por monjes benedictinos cluniacenses que acompañaban a Alfonso VI en la conquista de Madrid, este barrio es el antiguo arrabal de San Martín, el primer asentamiento de población fuera de las murallas medievales.
Ya se tienen de él noticias desde 1126. La cerca construida en tiempo de los Reyes Católicos encerró todos los arrabales extramuros, y una de sus puertas estaba precisamente en la calle que por tal motivo se llama Postigo de San Martín.
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